La crisis del Coronavirus ha impulsado la necesidad del teletrabajo para gran parte de la población. Esta nueva manera de trabajar para muchos, tiene ciertos beneficios que debemos de tener en cuenta para llevar el trabajo de la forma más eficiente y confortable.
Los beneficios del teletrabajo no son solo la libertad y la flexibilidad de horarios que permite, sino también la conciliación con la vida personal, la reducción de gastos y la comodidad de trabajar en casa.
¿Cómo sacar el mejor rendimiento a estos beneficios?
Todo empieza con el espacio de trabajo. Si, una de las claves esta en nuestro Home Office.
Para ayudaros a aprovecharos de todos estos beneficios os dejamos varios tips, respondiendo a tres preguntas vitales para diseñar un buen espacio Home Office: ¿Por qué? ¿Dónde? y ¿Cómo?
¿Porqué?
El objetivo principal de equiparnos un buen espacio Home Office es diseñar un buen espacio de trabajo en el hogar donde ser más productivo y estar a gusto trabajando, es decir que el espacio confortable impulse nuestra productividad.
¿Habrá llegado el teletrabajo para quedarse? Invirtamos en nuestro bienestar y en nuestra productividad para aprovechar al máximo los beneficios de esta tendencia forzosa.
¿Dónde?
El lugar elegido es una de las claves. Debe ser un lugar acogedor que nos invite a trabajar, lejos de distracciones como Televisiones y zonas de transito diarío.
Hay que tener en cuenta que el espacio elegido tenga acceso a luz natural, así como a luz artificial y buena conectividad para conectar los equipos de trabajo. Por suerte, esta Crisis del COVID-19 nos ha cogido en la era digital donde estamos más conectados que nunca.
¿Cómo?
Una vez tenemos los motivos y hemos seleccionado el lugar donde habilitar nuestro espacio Home Office, debemos de equiparlo debidamente.
Tenemos que contar con una buena mesa, preferiblemente elevable para poder alternar el trabajo sentado y de pie que ayuda a nuestro bienestar fisico y emocional. Otra opción alternativa a una mesa de altura estandar (aprox 74cm) es contar con una mesa alta (aprox 100cm) y un taburete ergonómico en el que estemos comodos durante la jornada de trabajo. Además la mesa, independientemente de su altura debe estar equipada para el paso de cables a través de un canal de electrificación y un acceso a cableado que nos facilite la conexión de equipos.
Una buena silla ergonómica que se adapte a tus necesidades posturales y fisiológicas es clave para conseguir un mayor confort y por tanto una mayor productividad.
Es importante también contar con un lugar de archivo en formato móvil como una cajonera o en formato
fijo como estanterias o armarios, donde almacenar los documentos o libros que podamos necesitar.
Por último, se recomienda disponer, si el espacio lo permite, de una zona relax y de lectura donde poder sentarnos cómoda y relajadamente para leer informes, mails o simplemente descansar para tomarse una taza de café tranquilamente.
